He aquí un método de “concentración intelectual” para conseguir resultados creativos:
- Acallar el ruido de la mente.
- Dejar aparecer del torrente interior.
- Perder la familiaridad con los conceptos o la realidad habitual.
- Aflorar conexiones entre cosas antes inexistentes.
- Renacer de sentidos, significados y relaciones.
- Aparición de nuevos conceptos.
Lo que podemos conseguir es algo así como una meta-noosis: una toma de conciencia, captación de una relación entre cosas o elementos que estaba oculta previamente.
De este modo podemos obtener teorías e ideas trans-perceptivas, porque se alimentan de las conexiones entre elementos previamente alejados (a través de estados o sinestesias intelectivas)
En ocasiones, también es posible usar la desatención: desatiende y luego súbitamente vuelve a un tema y sabrás lo que piensas de él.
Todo esto sucede, probablemente, porque el conocimiento se nos presenta “a saltos”, porque apenas hay continuidad entre la percepción de una nueva realidad y la que poseíamos anteriormente.
Cuando todas las palabras del exterior son un estorbo, solo hay un torrente donde encontrar palabras auténticas, y ese lugar está dentro de ti. Se trata de desarrollar una tecnología de la conciencia.
En ocasiones, aunque parezca contradictorio, es el estar en un estado sintomático de hiperestesia lo que nos lleva a percibir sinestesias que nos abren conocimiento sobre la estructura interna del ser y de sus relaciones.
Porque el pensar también puede ser una actividad creativa. Ni mucho menos es una actividad rígida y reservada a una minoría: es la forma en la que nos concebimos y entendemos lo que nos rodea.